La propuesta de Fomento para rescatar a las radiales en quiebra ha logrado el visto bueno de la administración concursal de Accesos Madrid, concesionaria de la R-3 y R-5. Según el informe que han emitido los administradores de estas vías, las medidas presentadas por el Gobierno "son asequibles" y constituyen "la única vía con visos de evitar la liquidación" de las autopistas.
Estas dos radiales son las primeras vías en quiebra que han presentado una propuesta de convenio para salvarse, sin embargo, el proceso no avanza con normalidad porque la banca acreedora extranjera ha presentado un recurso contra el plan de rescate diseñado por el Gobierno.
Concretamente, Fomento quiere aglutinar las ocho autopistas en quiebra en una sociedad estatal, la Seittsa, pero antes, la banca tendrá que aprobar una quita del 50% de la deuda, que asciende a unos 3.500 millones de euros.
La banca extranjera no está dispuesta a asumir una quita tan elevada, ya que consideran que no se puede aplicar el mismo criterio a todas las concesionarias.
Por otro lado, el plan del Gobierno contempla que el resto del pasivo se convierta en un bono a 30 años, con una rentabilidad al 1%. Éste es precisamente el otro punto de conflicto, que en este caso no convence ni siquiera a la banca nacional, que en su momento pidió un tipo de interés equivalente al del bono español, y que estaba por debajo del 3%.
De momento, las reuniones de Fomento con las concesionarias y la banca siguen produciéndose, a la espera de que el juez abra el plazo para que los acreedores voten la propuesta para salvar las radiales R-3 y R-5.
Tal y como explicaron fuentes cercanas al proceso a este periódico, parece que hay un cierto acercamiento entre las posturas de las distintas partes, que incluso se está produciendo una aproximación en el tema de los bonos, pues aseguran que "el tipo de interés está en discusión y es posible que se llegue a un punto intermedio".
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