Uno de los peajes de la AP-9. // Noe Parga |
Con el aumento del tráfico en la Autopista del Atlántico durante el pasado ejercicio, después de tres siete largos años de reducción, lo lógico es que también la caja de la concesionaria rompiera con las caídas acumuladas durante la crisis. Y así fue. El importe neto de la cifra de negocios, básicamente por el cobro de peajes, alcanzó en 2014 los 127,75 millones de euros, lo que supone un 2% más que en 2013, cuando se tocó el mínimo de ingresos, con 125,218 millones de euros, según la información remitida ayer por Audasa, la empresa encargada de la gestión de la vía, a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En este caso, el negocio llevaba cuatro ejercicios de descensos, desde 2010. La intensidad del aumento en la aportación de los conductores, esos dos puntos, contrasta con la velocidad a la que se recuperan los usuarios, que, según las estadísticas oficiales del Ministerio de Fomento, fueron solo un 0,3% más.
El cambio de tendencia en la actividad de la autopista y el impacto correspondiente en las cuentas se nota especialmente durante el segundo semestre del año. El negocio en la segunda mitad de 2014 crece cerca de un 3%. Lo que coincide también con los meses en los que más se elevaron los tráficos. Solo en agosto, por el Puente de Rande -uno de los tramos de mayor circulación de toda la carretera-, pasaron casi 3.000 vehículos por encima de las cifras del ejercicio anterior, una alza del 4,4%.
El beneficio de Audasa, sin embargo, cerró 2014 con otro descenso. Del 2,8%, hasta los 28,518 millones de euros. ¿Por qué? La clave está en la importante subida de los gastos financieros. Del coste de la deuda que acumula la sociedad y de las nuevas emisiones lanzadas en 2014. En marzo lanzó un paquete de 195,8 millones de euros ampliables a 400 millones para financiar las obras pendientes en el trazado, especialmente las de Rande, que acaban de echar a andar. Los gastos financieros sumaron 30,412 millones de euros, un 14,7% más sobre los 26,522 millones desembolsados en 2013.
Con el régimen de contención interna implantado por la compañía, como así admite en sus memorias anuales de los dos últimos ejercicios, la partida dedicada a la plantilla vuelve a pasar por la tijera. El gasto de personal cae un 3,3%, con 9,764 millones de euros. Los otros gastos que absorbe la explotación de la concesionaria sí aumentan, un 11,3%, hasta los 18,356 millones de euros. El resultado bruto de Audasa se sitúa en 41,018 millones de euros, a lo que hay que restar los 12,5 millones de euros de pago de impuestos.
Tras los fondos captados en el mercado para costear las obras de ampliación de la autopista, el total de deudas a largo plazo que suma Audasa llega a los 990,125 millones de euros, con un aumento anual del 49%. La mayoría, 961 millones, son préstamos bancarios y los bonos. En deudas a corto plazo hay 65,59 millones, tras un descenso del 52% respecto a 2013; y 9,454 en acreedores comerciales. En total, 1.065 millones.
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