El Ministerio de Fomento quiere sacar a los camiones de las carreteras convencionales para que utilicen más las autopistas de peaje. Aseguran que ayudará mucho a mejorar la seguridad en vías de doble sentido. El problema es que las autopistas suponen un coste adicional para los transportistas.
El ministerio negocia cómo ayudarles a pagar los peajes para que no se conviertan en una nueva carga. Las asociaciones piden que sean medidas que puedan aprovechar todos, tanto para las grandes como las pequeñas empresas.
Cada día, un millón y medio de camiones circulan por las carreteras de Castilla y León.
El ministerio de Fomento destinará 43 millones para ayudar a sacar a los vehículos pesados de las carreteras convencionales, en 2015.
Para las asociaciones la mejor opción sería a través de rabajas directas en el pago, porque creen que la subvención beneficiaría sólo a los grandes. En Castilla y León hay 15.000 empresas, algunas con flota, pero la mayoría con uno o dos camiones.
La propuesta también incluye el fomento de peajes para vehículos ligeros entre las once de la noche y las siete de la mañana.
Tampoco se ha concretado si afectará a todas las autopistas o no. En Castilla y León podrían estar incluidas la A-1 Villacastín-Segovia, y la León-Campomanes. De momento el ministerio ha mantenido encuentros con representantes del sector y algunos ayuntamientos.
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