Seguramente que en más de una ocasión habéis barajado la opción de entre viajar por una autopista de peaje o por una carretera nacional pero que tras consultar el coste del peaje os habéis decidido por una carretera nacional. No sois los únicos que habéis tomado esta decisión alguna vez, ya que, tal y como muestra un estudio del portal Coches.net, siete de cada diez conductores prefieren modificar su ruta para así evitar peajes y… ¿gastos innecesarios?
¿Me creeríais si os dijera que en muchas ocasiones ahorrarte un peaje puede suponerte un mayor gasto en el desplazamiento? El motivo de ello es que a la hora de elegir la mejor ruta, no solo hay que basarse en el coste del peaje, sino en la seguridad del trayecto, el tiempo del desplazamiento y el consumo de gasolina.
Para optar por una ruta u otra, debemos barajar no solamente el dinero que vamos a gastarnos si pasásemos por un peaje, sino también el tiempo del viaje y la seguridad que la carretera posee. Una vez sopesado estos aspectos, podremos decidir cuál es la mejor alternativa desde el punto de vista económico.
Respecto al tiempo del desplazamiento, tanto una autopista como una autovía están diseñadas para evitar pueblos y ciudades pequeñas. En ellas, es difícil encontrarse con zonas en las que la velocidad sea reducida, salvo en casos excepcionales como obras. Por ello, el tiempo del trayecto puede verse bastante reducido y, por tanto, el consumo.
En cambio, las carreteras nacionales o secundarias suelen cruzar por pueblos, tener un único carril donde la posibilidad de adelantamiento se ve mermada e incluso obligarte a muchos cambios de velocidad o paradas por semáforos.
El segundo factor a considerar es la seguridad de la carretera. Nos jugamos mucho en ella por lo que es un factor importantísimo. Por diseño, las autovías y autopistas son mucho más seguras que las nacionales ya que estás últimas pueden tener más puntos negros que pueden hacer peligrosa la conducción.
El último aspecto es el coste. Si comparamos autopistas y nacionales tenemos que fijarnos en, primer lugar, en las diferencias de consumo y, en segundo lugar, en el acceso gratuito. Por regla general, las autovías favorecen a un menor consumo por su diseño, el cual, permite una conducción mucho más ligera. A favor de la carretera nacional, independientemente del gasto de combustible, tendríamos que su acceso es gratuito.
No obstante, las diferencias de tarifas pueden ser muy grandes en distintas autopistas, por lo que es aconsejable conocer cuál es la más cara y la más barata de España para poder planificar bien el viaje.
Entrar a una autopista de peaje siempre tiene un coste para el bolsillo y, por ello, hay que conocer qué tramos son los más caros de España y, también, los más baratos.
Además, también hay que saber que no es lo mismo circular el 1 de agosto que el 15 de mayo. No solo porque el apartamento de la playa nos saldrá más caro, sino porque nos costará más circular por las vías de pago. Es decir, el precio de las autopistas de peaje varía de manera significativa en función del territorio, fecha, y hora en la que realicemos el viaje.
¿Dónde pagaremos más? Si atravesamos el Túnel de Soller situado en la isla de Mallorca, de apenas 3 km de largo, pagaremos 1,67 euros por kilómetro recorrido. El segundo tramo más caro es otro túnel, el de Cadí, en el prepirineos catalán. En él, el kilómetro cuesta 0,39 euros, por lo que por su casi 30 km de recorrido costaría 11,66 euros.
Otros que están entre los peajes más caros son el Túnel de Vallvidriera de 16,65 km de largo y que tiene un coste de entre 3,72 y 4,19 euros (25 céntimos el km); la autopista de Sant Cugat con Manresa (24 céntimos el km) o la M-12 del aeropuerto de Barajas en Madrid (0,21€ el km).
Entre las más baratas, que cuesten 10 céntimos o menos el km está el tramo entre Barcelona y Tarragona, la autopista de Sevilla a Cádiz (0,07€/km) o la autovía que une Puxeiros con Baiona, cuyo coste es de 0,05/km, la más barata de todas.
En cuanto al tiempo del trayecto y la seguridad, la autopista de pago siempre será una opción mucho más conveniente que cualquier otra carretera nacional. Sin embargo, desde el punto de vista del coste, esquivar los peajes y optar por rutas alternativas no siempre es lo más barato.
En cuanto al coste, debemos partir de la premisa de que tu coche tendrá un consumo mucho menor en una autopista de peaje que en una nacional. Pero al consumo hay que sumarte el coste del peaje.
Por ello, coge una calculadora y valora el consumo de cada ruta teniendo en cuenta el tiempo de cada una y los kilómetros que tienen. Además, suma a la alternativa del peaje el coste del mismo. Para conocer estos datos de manera más exacta, existen portales como Via Michelín, que proporcionan datos sobre el coste del trayecto.
Una vez con los datos en la mano, podrás ver si el ahorro de no pagar el peaje compensa sobradamente el exceso de consumo por lo kilómetros de más por ir por nacional, o si el peaje es la opción más económica. Pese a todo esto, la última decisión siempre la tienes tú.
ActiBva.com 11/05/2014
¿Me creeríais si os dijera que en muchas ocasiones ahorrarte un peaje puede suponerte un mayor gasto en el desplazamiento? El motivo de ello es que a la hora de elegir la mejor ruta, no solo hay que basarse en el coste del peaje, sino en la seguridad del trayecto, el tiempo del desplazamiento y el consumo de gasolina.
Para optar por una ruta u otra, debemos barajar no solamente el dinero que vamos a gastarnos si pasásemos por un peaje, sino también el tiempo del viaje y la seguridad que la carretera posee. Una vez sopesado estos aspectos, podremos decidir cuál es la mejor alternativa desde el punto de vista económico.
Respecto al tiempo del desplazamiento, tanto una autopista como una autovía están diseñadas para evitar pueblos y ciudades pequeñas. En ellas, es difícil encontrarse con zonas en las que la velocidad sea reducida, salvo en casos excepcionales como obras. Por ello, el tiempo del trayecto puede verse bastante reducido y, por tanto, el consumo.
En cambio, las carreteras nacionales o secundarias suelen cruzar por pueblos, tener un único carril donde la posibilidad de adelantamiento se ve mermada e incluso obligarte a muchos cambios de velocidad o paradas por semáforos.
El segundo factor a considerar es la seguridad de la carretera. Nos jugamos mucho en ella por lo que es un factor importantísimo. Por diseño, las autovías y autopistas son mucho más seguras que las nacionales ya que estás últimas pueden tener más puntos negros que pueden hacer peligrosa la conducción.
El último aspecto es el coste. Si comparamos autopistas y nacionales tenemos que fijarnos en, primer lugar, en las diferencias de consumo y, en segundo lugar, en el acceso gratuito. Por regla general, las autovías favorecen a un menor consumo por su diseño, el cual, permite una conducción mucho más ligera. A favor de la carretera nacional, independientemente del gasto de combustible, tendríamos que su acceso es gratuito.
No obstante, las diferencias de tarifas pueden ser muy grandes en distintas autopistas, por lo que es aconsejable conocer cuál es la más cara y la más barata de España para poder planificar bien el viaje.
Entrar a una autopista de peaje siempre tiene un coste para el bolsillo y, por ello, hay que conocer qué tramos son los más caros de España y, también, los más baratos.
Además, también hay que saber que no es lo mismo circular el 1 de agosto que el 15 de mayo. No solo porque el apartamento de la playa nos saldrá más caro, sino porque nos costará más circular por las vías de pago. Es decir, el precio de las autopistas de peaje varía de manera significativa en función del territorio, fecha, y hora en la que realicemos el viaje.
¿Dónde pagaremos más? Si atravesamos el Túnel de Soller situado en la isla de Mallorca, de apenas 3 km de largo, pagaremos 1,67 euros por kilómetro recorrido. El segundo tramo más caro es otro túnel, el de Cadí, en el prepirineos catalán. En él, el kilómetro cuesta 0,39 euros, por lo que por su casi 30 km de recorrido costaría 11,66 euros.
Otros que están entre los peajes más caros son el Túnel de Vallvidriera de 16,65 km de largo y que tiene un coste de entre 3,72 y 4,19 euros (25 céntimos el km); la autopista de Sant Cugat con Manresa (24 céntimos el km) o la M-12 del aeropuerto de Barajas en Madrid (0,21€ el km).
Entre las más baratas, que cuesten 10 céntimos o menos el km está el tramo entre Barcelona y Tarragona, la autopista de Sevilla a Cádiz (0,07€/km) o la autovía que une Puxeiros con Baiona, cuyo coste es de 0,05/km, la más barata de todas.
En cuanto al tiempo del trayecto y la seguridad, la autopista de pago siempre será una opción mucho más conveniente que cualquier otra carretera nacional. Sin embargo, desde el punto de vista del coste, esquivar los peajes y optar por rutas alternativas no siempre es lo más barato.
En cuanto al coste, debemos partir de la premisa de que tu coche tendrá un consumo mucho menor en una autopista de peaje que en una nacional. Pero al consumo hay que sumarte el coste del peaje.
Por ello, coge una calculadora y valora el consumo de cada ruta teniendo en cuenta el tiempo de cada una y los kilómetros que tienen. Además, suma a la alternativa del peaje el coste del mismo. Para conocer estos datos de manera más exacta, existen portales como Via Michelín, que proporcionan datos sobre el coste del trayecto.
Una vez con los datos en la mano, podrás ver si el ahorro de no pagar el peaje compensa sobradamente el exceso de consumo por lo kilómetros de más por ir por nacional, o si el peaje es la opción más económica. Pese a todo esto, la última decisión siempre la tienes tú.
ActiBva.com 11/05/2014
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