La ministra de Fomento, Ana Pastor, quiso limitar ayer en Santiago su responsabilidad ante las reiteradas críticas que sufre el servicio que la Autopista del Atlántico (AP-9) ofrece a sus usuarios y la reciente petición del PP gallego de que los turismos no paguen peaje. “Cuando llegué al Gobierno me encontré con una autopista con una concesión hasta 2047”, comenzó diciendo la ministra a preguntas de los medios de comunicación sobre las gestiones que está haciendo su departamento. Algo más tarde insistió en el mismo argumento: “Yo no soy la que hice una concesión hasta 2047, y por lo tanto, lo que estoy haciendo es intentando mejorar en la medida que puedo y de las posibilidades”.
Pastor se refería a la ampliación de la concesión de la AP-9 que Audasa, entonces empresa pública, tenía incialmente hasta 2023. En 2000 el Gobierno de José María Aznar la prorrogó otros 25 años más, hasta el máximo legal, a cambio de que la concesionaria construyera sin peaje el tramo entonces aún no iniciado de acceso a Ferrol y otro de circunvalación parcial de Vigo. Aznar no nombró a Ana Pastor ministra de Sanidad hasta 2002, pero ya había sido alto cargo en varios ministerios y, desde el mismo 2000, diputada por la provincia de Pontevedra. En 2003, con la concesión ya prorrogada, el Gobierno de Aznar privatizó la autopista.
Ayer la ministra, tras desvincularse de esa prórroga de la concesión, destacó que ella ha logrado mejoras en las tarifas de la autopista —gratuidad de los viajes de vuelta entre Vigo y Pontevedra— “sin cambio concesional”. También destacó la próxima ampliación del puente de Rande y del tramo de circunvalación de Santiago, obras que supondrán a cambio un incremento del peaje en toda la vía. “Cualquier cosa que se haga en materia de peajes, la pagan todos los españoles [...] Ya sabemos que milagros no hay”, dijo también Ana Pastor.
Sobre los atascos registrados este verano, como en años anteriores, la ministra indicó que el expediente que su departamento abrió a la concesionaria al respecto incluye una “auditoría global” sobre el “cumplimiento” del servicio más allá de las retenciones estivales. La ministra hizo estas declaraciones tras la firma en Santiago de un convenio con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para el impulso del alquiler y la rehabilitación de viviendas.
El País.com 05/09/2014
Pastor se refería a la ampliación de la concesión de la AP-9 que Audasa, entonces empresa pública, tenía incialmente hasta 2023. En 2000 el Gobierno de José María Aznar la prorrogó otros 25 años más, hasta el máximo legal, a cambio de que la concesionaria construyera sin peaje el tramo entonces aún no iniciado de acceso a Ferrol y otro de circunvalación parcial de Vigo. Aznar no nombró a Ana Pastor ministra de Sanidad hasta 2002, pero ya había sido alto cargo en varios ministerios y, desde el mismo 2000, diputada por la provincia de Pontevedra. En 2003, con la concesión ya prorrogada, el Gobierno de Aznar privatizó la autopista.
Ayer la ministra, tras desvincularse de esa prórroga de la concesión, destacó que ella ha logrado mejoras en las tarifas de la autopista —gratuidad de los viajes de vuelta entre Vigo y Pontevedra— “sin cambio concesional”. También destacó la próxima ampliación del puente de Rande y del tramo de circunvalación de Santiago, obras que supondrán a cambio un incremento del peaje en toda la vía. “Cualquier cosa que se haga en materia de peajes, la pagan todos los españoles [...] Ya sabemos que milagros no hay”, dijo también Ana Pastor.
Sobre los atascos registrados este verano, como en años anteriores, la ministra indicó que el expediente que su departamento abrió a la concesionaria al respecto incluye una “auditoría global” sobre el “cumplimiento” del servicio más allá de las retenciones estivales. La ministra hizo estas declaraciones tras la firma en Santiago de un convenio con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para el impulso del alquiler y la rehabilitación de viviendas.
El País.com 05/09/2014
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