Según ha explicado el conseller de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat, Santi Vila, el objetivo de esta "ambiciosa reforma es armonizar y homogeneizar un modelo que tenía disfunciones y atrofias".
Los 93 millones de euros de inversión, que no tienen como contrapartida alargar la concesión, permitirán, según el conseller, incrementar el tráfico de estos corredores, descongestionar las carreteras convencionales y mejorar la seguridad viaria.
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