viernes, 20 de marzo de 2015

¿Un peaje de un euro por viajar entre Oviedo y Gijón en coche?

Obras de infraestructuras
Desplazarse entre Oviedo y Gijón podría costar desde 0,81 euros hasta 3,78. Cruzar Asturias de oriente a occidente, de Ribadedeva a Llanes, podría salirnos hasta por 30 euros. Que los habitantes de Pola de Lena den un paseo por el muro de Gijón oscilaría entre 1,35 euros y 6,3. Esos serían los precios que los conductores que tendrían que abonar si la propuesta de la patronal de las constructoras (Seopan) de extender los peajes a la mayoría de las autovías españolas saliese adelante. Las grandes compañías quieren equiparar España con el resto de Europa, donde, de media, el 80% de las vías de altas capacidad son de pago. Su idea es que se cobre a todos los vehículos, tanto a los turismos particulares, como a las furgonetas de reparto y los camiones. Para los precios proponen una horquilla que oscila de 3 céntimos por kilómetros a 14. Con este sistema creen que se podría recaudar hasta 6.800 millones de euros al año.
La polémica está servida. ¿Deben los conductores pagar por circular por las autopistas en desplazamientos locales y regionales? ¿Tiene razón de ser la extensión del sistema de peajes en España?  Con este dinero, los empresarios proponen al Gobierno que mejore el mantenimiento de las carreteras y que financie un plan de inversión en infraestructuras públicas, que es lo que Seopan explica que necesitan para mejorar sus cuentas de resultados. Ese plan de inversiones lo cifra en 66.000 millones de euros.
Más números para el proyecto. Para poner en marcha la ampliación de los peajes sería necesaria una inversión inicial de 627 millones de euros y el coste posterior del mantenimiento anual rondaría los 247 millones al año. Si los ingresos máximos estimados anuales ascienden a 6.828 millones de euros anuales, el negocio que Seopan sirve al Gobierno parece redondo. Pero, ¿cómo lo recibirán los conductores que tendrán que empezar a pagar?

Los precios no son una broma. Con la web de Guía Michelín como herramienta de viaje, ASTURIAS24 ha calculado el coste de, al menos siete recorridos dentro del Principado.

  1. Oviedo-Gijón. A través de la Y. El recorrido de centro a centro es de 32 kilómetros, de los que 27 son por autovía. En la versión más económica (multiplicada por 3 céntimos), el viaje costaría 0,81 euros. La más cara (multiplicada por 14 céntimos), se elevaría a 3,78 euros.
  2. Tapia de Casariego-Colombres (Ribadedeva). Autovía del Cantábrico. De los 226 kilómetros que unen el centro de ambas localidades, 215 son por autovía. Cruzar Asturias de oeste a este puede costar de 6,45 euros hasta 30,1 euros, en función de la tarifa que el Gobierno elija, tomando como referencia la horquilla de Seopan.
  3. Mieres-Colunga. Autovía Minera y Autovía del Cantábrico. Ambas localidades están separadas por casi 70 kilómetros de los que 62 son vías de alta capacidad. Salir del corazón de la cuenca hasta esta localidad costera del oriente puede costar entre 1,86 euros y 8,68.
  4. Avilés-Oviedo. Autovía del Cantábrico y Autovía YEl centro de ambas urbes está separado por 35 kilómetros, de los que 26 son por autovías. El coste del peaje oscilaría entre 0,78 euros y 3,64.
  5. Pola de Lena-Gijón. A-66 y Autovía Minera. El centro de ambas localidades está separado por 51 kilómetros de los que 45 corresponden a autovías. La tarifa del viaje oscilaría entre 1,35 euros y 6,3.
  6. Pola de Siero-Aeropuerto de Asturias. Autovía del Cantábrico y Autopista Y. Desde el centro de La Pola hasta la terminal de salidas hay 54 kilómetros, de los que 47 son por vías de alta capacidad. El desplazamiento para coger un vuelo en el Principado costaría entre 1,41 euros y 6,58.
  7. Villaviciosa-Llanes. Autovía del Cantábrico. Desde las calles interiores de La Villa hasta el centro de Llanes la distancia es de 66 kilómetros, de los que 62 son a través de la autovía. Este viaje podría suponer al conductor entre 1,86 euros y 8,68.

La patronal de las constructoras también calcula como todo el dinero que los conductores desembolsarían se traduciría en dinero. Calcula que se podrían crear un millón de puestos de trabajo que generaría un retorno fiscal a las arcas del Estado superior a los 30.000 millones de euros en el periodo comprendido entre los años 2016 y 2019. 

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