Los profesionales del sector del transporte de Ourense han transmitido a los responsables de la Xunta de Galicia, a través de la Federación Gallega de Transportes de Mercancias (Fegatramer), las principales preocupaciones que sufren en la actualidad, y que están relacionadas, principalmente, con el problema de los elevados peajes de las autopistas, y lo han hecho dentro de la Comisión de Seguridad Vial del Parlamento gallego.
"Peajes y seguridad viaria son fenómenos contrapuestos", asegura de forma categórica el secretario provincial de la Asociación Empresarial de Transporte de Mercancías (Apetamcor), Alberto Vila, que pone un ejemplo de cómo está la situación a día de hoy: "Un transportista que lleve agua de Verín a Gadisa, en Betanzos, tendrá un sobrecoste diario de 51,50 euros en peajes de autopista, lo que supone más de 1.000 euros en un mes". Es el coste, en un mes, de la autopista desde Lalín hasta la localidad de Betanzos. Por esta razón, según señala Vila, "muchos transportistas optan por coger en Lalín la carretera nacional", que pasa por varias localidades como Agolada, Melide o Cuntis, entre otras, "con el consiguiente riesgo de accidentes", además de los problemas que conlleva que el tráfico pesado pase por el centro y las colapsadas travesías de todos estos cascos urbanos.
El secretario provincial de Apetamcor asegura que "muchos profesionales del sector han abandonado las autopistas porque el pago de peajes les supone prácticamente el cincuenta por ciento de los gastos de mantenimiento". Y añade que un ejemplo paradigmático de este abandono de las autopistas por parte de los transportistas está en el tramo entre Vigo y Porriño, a la altura de Mos, donde los profesionales del sector montan largas colas en uno de los carriles de la autovía, mientras la autopista, que va en paralelo, "está prácticamente vacía de tráfico pesado".
En este sentido se pronunciaba también esta semana el secretario general de Fegatramer, José Carlos García Cumplido, quien señalaba que los elevados costes de los peajes hacen que gran parte de los camiones usen, en muchos casos, "vías secundarias alternativas a las autopistas, menos seguras que estas últimas, y sin dotación de áreas de descanso y servicios", incrementándose de manera importante los riesgos en las carreteras convencionales de la Comunidad autónoma de Galicia, tanto para los propios camiones como para los otros usuarios de las vías.
Desde las asociaciones profesionales del sector del transporte se pide "que se haga un estudio que costante que el tráfico pesado está abandonando las vías de alta capacidad" y, después, que se lleve a cabo una reducción del coste de los peajes de las autopistas "para los profesionales del sector", explica Alberto Vila.
El secretario provincial de Apetamcor considera que "no se puede tratar igual a un transportista profesional que a un particular" y señala que esa tarifa especial es para devolver el tráfico pesado a las vías de alta capacidad, "que es donde deben de estar, por razones de seguridad y de comodidad para el resto de usuarios", añade Vila.
De momento, y a la espera de que Xunta y Gobierno tomen alguna decisión al respecto, los transportistas siguen apostando por las vías alternativas a esas autopistas que suponen un sobrecoste inasumible, a día de hoy, para un sector ya muy afectado por la crisis económica y la subida de carburantes.
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